Según la Organización Panamericana de la Salud -OPS- : “El Cambio Climático es la mayor amenaza para la salud mundial del siglo XXI” 1 y es que por cuenta de los cambios en el clima las poblaciones podrían verse afectadas directamente por: olas de calor más extensas, sequías, tormentas fuertes, huracanes y aumento del nivel del mar.

El cambio climático es una realidad, “en los últimos 130 años el mundo se ha calentado aproximadamente 0,85 ºC. Durante los últimos 30 años cada década ha sido más cálida que cualquier década precedente desde 1850”.2

Según la OPS los principales impactos negativos del clima en la salud humana podrían darse por cuenta de:

  • La proliferación de enfermedades de las vías respiratorias como asma y las causadas por la exposición a los aeroalérgenos.
  • Aumento de enfermedades transmitidas en el agua.
  • Aumento del crecimiento, supervivencia y persistencia de microbios patógenos.
  • Cambio en la distribución geográfica y estacional de enfermedades; en las regiones con climas tropicales aumentará la incidencia de enfermedades transmitidas por vectores. 
  • Mayor mortalidad cardiopulmonar por la presencia de partículas y la concentración de ozono muy tóxico,  y  agravamiento de enfermedades circulatorias.
  • Pérdidas de salud ocasionadas por desastres naturales,  inseguridad alimentaria y del agua, desnutrición y desplazamientos forzados, entre otros.
  • Aumento del estrés y enfermedades mentales.
  • Disminución de la capacidad laboral, riesgo de agotamiento por calor, paro cardiaco y accidentes laborales en quienes trabajan al aire libre.

Es un panorama complejo que requiere de acciones de gobiernos, líderes empresariales, comunitarios, directivos, y a nivel doméstico, en el que quienes trabajamos en SST podemos aportar incentivando la adaptación de las organizaciones al cambio climático.

  • Implementar, hacer seguimiento y optimizar políticas y acciones tendientes al uso racional de la energía y el agua en los entornos laborales y domésticos.
  • Implementar de la mano de los directivos de las empresas políticas que favorezcan la adquisición de productos con producción sostenible, y reciclable, con  bajo consumo energético y de flotas cero emisiones.
  • Incentivar el uso de sistemas de transporte masivos o con cero emisiones.
  • Incentivar el teletrabajo y los cambios de horario tendientes a disminuir la actividad en los horarios con más calor.
  • Incentivar desde SST la creación en las organizaciones de “empleos verdes” y sostenibles, que en palabras de la OIT son aquellos que “Contribuyen directamente a la sostenibilidad ambiental, ya sea produciendo bienes ambientales o haciendo un uso más eficiente de los recursos naturales”.


Garantizar el cumplimiento de la normativa vigente en materia de Seguridad y Salud en el trabajo por parte de quienes se desempeñan en los empleos verdes y fomentar políticas tendientes a garantizar su sostenibilidad financiera a futuro.

  • Generar una cultura de cuidado por el medioambiente al interior de las organizaciones, a través de la implementación de políticas y acciones tendientes a optimizar el consumo de energía eléctrica.

A todo lo anterior se suma que debemos anticiparnos a los eventos derivados del cambio climático que puedan ocurrir en nuestras organizaciones, por lo que debemos desarrollar, socializar y de ser necesario, actualizar  protocolos tendientes a responder de manera adecuada ante estas situaciones al interior de los ambientes laborales.

¿Qué estás haciendo para afrontar en tu organización el cambio climático?

Referencias:

  1. https://www.paho.org/es/temas/cambio-climatico-salud
  2. IPCC. Summary for Policymakers, 2014. Mitigation of Climate Change Contribution of Working Group III to the Fifth Assessment Report of the Intergovernmental Panel on Climate Change. Cambridge, United Kingdom and New York, NY, USA.: Cambridge University Press; 2014